domingo, 24 de mayo de 2015

CAPITULO 50

-Entonces le correspondiste el beso –me pregunto Nacho haciéndolo sonar más como una afirmación-

Agarré un vaso de jugo y me senté al lado de ellos

-No le correspondí…solo que no lo separé
-En mi mundo es no corresponderle el beso –dijo Zaira-
-En mi mundo es estar bastante conmocionada porque tu ex novio volvió
-¿Sigue estando igual de lindo? –me preguntó Zai y después miro a Nacho frunciendo el ceño- ¿Qué? No me mires así!
-Está mejor aún –le dije enterrando mi cabeza en mis piernas para no verlos-
-¿Y qué pensas hacer?
-¿Ignorar mis problemas hasta que un día desaparezcan?
-¡Paula! –me reprimió Zaira-
-No lo sé! –dije alzando la cabeza- ¿Qué se supone que tengo que hacer? Hace una hora atrás estaba decidida a que iba a ir a hablar con Pepe y ahora…agh es increíble cómo pueden cambiar las cosas en cuestión de segundos
-¿Seguís sintiendo cosas por Facundo? –me pregunto Ignacio muy serio-

Esa es la pregunta que no esperaba responder. ¿Seguía sintiendo cosas por Facundo? Era cierto que reencontrármelo me había hecho sentir cosas por el que pensaba que ya había dejado atrás, pero el resentimiento que sentía por él era más fuerte que todos esos sentimientos. O eso me quería hacer creer yo.

-Tal vez.

Ellos no dijeron nada esperando que siga hablando.

-Todavía no lo sé ¿está bien? Lo acabo de ver hace una maldita hora y todavía sigo temblando. Ay lo odio!! –dije de repente- ¿Qué derecho tiene de venir y querer arreglar las cosas y querer que volvamos juntos y confundirme y…y…
-Y dejarte con las ganas de seguir besándolo? –me sugirió Nacho-
-Exacto! –dije aliviada de que me haya dado una mano y luego palidecí- No! Definitivamente no!
-Pau…–Zai me agarró la mano tratando de tranquilizarme- mejor deja de pensar por un rato en Facundo y pedro ¿sí?
-Es imposible –murmuré- ni siquiera sé qué le voy a decir a Pedro.
-Decile que te hiciste lesbiana –me respondió Nacho-

Zaira y yo lo fulminamos con la mirada.

-¿Qué? Le puede solucionar los dos problemas y mata a dos pájaros de un tiro. Les decís que sos lesbiana y ninguno de los dos puede hacer nada contra eso.

Agarré la almohada para tirársela pero después lo pensé por un momento.

¿Lesbiana? Tal vez no era mala idea…les diría que me enamoré de Zaira y ya no tendría chances conmigo…ellos no podrían hacer nada al respecto y yo no los volvería a ver a ninguno de los dos nunca más y ya no tendría más problemas y…

-¡Paula! –me gritó Zaira horrorizada viendo que lo estaba considerando- No caigas en las garras de Ignacio porque te perdemos
-Necesito dormir –dije-
-No –me dijo agarrándonos del brazo a Nacho y a mí- lo que necesitas es una salida de amigos para despejarte un poco.





Luego de dos días de pensar qué iba a decirle a Pedro o qué iba a hacer con mi vida de ahora en más, me rendí.

No podía ensayar lo que le iba a decir a Pedro porque sabía que en el momento en el que lo mirara me iba a poner nerviosa y me iba a olvidar de todo pero ya habían pasado semanas desde que no hablábamos y necesitaba hacerlo antes de que las cosas se complicaran más. Además lo extrañas dijo una voz dentro de mi cabeza.

Llegue a la conclusión de que no iba a contarle que Facundo volvió. No hasta que no sepa que quería o que sentía yo.
Marque su número y esperé.

-¿Pau? –me contestó como si hubiese estado esperando mi llamada desde hace tiempo-

Mi pulso se aceleró cuando escuche su voz. Lo extrañaba tanto…

-Pepe…¿Cómo estás?
-¿De verdad queres saberlo?

Mierda.

No contesté y él suspiró.

-Necesitamos hablar.
-Lo sé…¿podes venir a mi casa?
-En 10 minutos estoy allá.

Corte el teléfono y empecé a caminar de un lado a otro. Tenía el estómago revuelto y no sabía qué hacer.

De repente sonó el timbre y mis ojos se abrieron. Eso sí que fue rápido ¿ya habían pasado diez minutos?
Traté de tranquilizarme antes de abrir la puerta pero mi corazón no dejaba de recordarme lo nerviosa que estaba.

Vos podes me dije y abrí la puerta de un tirón y…

¿Me están jodiendo? ¿Esto está pasando? Mierda, mierda, mierda.

Me quedé boquiabierta al ver a Facundo parado al frente mío ¿Es que la vida me está mandando algún tipo de señal o solo le gusta joderme en los momentos más importantes?

-¿Tan feo soy? –me preguntó con una media sonrisa-
-No –dije sin pensar y luego me tapé la boca con la mano. Esto se estaba poniendo demasiado incómodo- ¿me podes decir qué estás haciendo acá?
-Necesito hablar con vos.

¿Por qué todos tenían que hablar conmigo hoy?


De repente entré en pánico. Si Pedro llegaba ahora las cosas se iban a complicar demasiado y mi plan iba a fracasar antes de empezar. Necesitaba que se vaya. Ahora.




-------------------------------------------------------------------------------




Holaaa! Tarde y cortito pero seguro. Porfa comenten y gracias por leer! Beso enorme.

2 comentarios: